Una despedida demasiado anticipada. Con apenas 17 años, el joven beisbolista venezolano Daniel Flores se llevó consigo el sueño de representar a su país en las Grandes Ligas para elevarse e ir a batear sobre el promedio en los predios celestiales.
El receptor, prospecto de los Medias Rojas de Boston, había firmado con el equipo en julio pasado y estaba deseoso por comenzar a jugar en las ligas menores. No obstante, la batalla contra el cáncer le cambió el diamante por una sala hospitalaria en los últimos para batallar con su diagnóstico y someterse a tratamientos con el propósito de superarlo.
En su breve carrera, ya había logrado destacarse con méritos propios, pues al ser considerado una de los peloteros más promisorios, logró firmar su contratación con el equipo bostoniano por 3,3 millones de dólares, el mejor salario para agentes libres venezolanos en 2017.
Por su parte, la organización Medias Rojas de Boston publicó un comunicado en sus redes sociales donde expresaba su tristeza por la pronta partida física de Daniel, ofreciendo sus condolencias a los familiares y compartiendo las palabras de representantes del equipo, quienes solo tuvieron elogios para el adolescente.
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