martes, 22 de mayo de 2018

LLEGÓ EL LIBRO INFATIGABLES A SUMMA EN CONCRESA

INFATIGABLES
El libro más esperado
YA ESTÁ EN SUMMA



Reclame su ejemplar antes que se agote
Librería Summa
C.C. Concresa  en Prados del Este

(0212 975 4448 y 975 3152


Un Ministro emperifollado, rodeado por el Alto Mando Militar en una alocución política, transmitida en cadena nacional de radio y televisión, asegurando que la Fuerza Armada es institucional, no es un hecho institucional: es, sencillamente, un acto político.

Los gobiernos corruptos relegan a la Fuerza Armada al papel de Guardia Pretoriana de sus desafueros. La ductoria militar en el Estado, lleva a la perversión militarista al Estado y la función coactiva es el camino a la perversión pretoriana.


La base de la Pirámide Militar tiene como fundamento al pueblo llano, cuyos hijos van al cuartel buscando salidas a su miserable inestabilidad con todo propósito de salir con vida del pozo de incertidumbre que le ahoga en vida. Cenagal en el que se hunde por la carencia de educación, capacitación y formación, herramientas que ni se consiguen en los cuarteles y que la sociedad no ha sido capaz de entregarle a los hombres y las mujeres de la nación, como es el deber de un Estado preocupado por sus ciudadanos.  

viernes, 18 de mayo de 2018

EL BEISBOL DE MIS RECUERDOS (15) Víctor José López EL YANKEE STADIUM





HOY ESTAMOS en Nueva York. Debimos haber visitado los estadios Yankee y Shea, de acuerdo al programa que hicimos con nuestro querido amigo Beto Villa, un venezolano triunfador en el beisbol de las grandes ligas y convertido, gracias a su calidad profesional en “La voz en castellano de los Yankees de Nueva York”. Ayer debieron disputarse dos partidos de beisbol en la Gran Manzana. A las dos de la tarde, el primero en Yankee Stadium, Mets vs Yankees; y otro a las ocho de la noche,  en Shea Stadium, Yankees vs Mets. Un curioso doble juego interligas,  para cumplir con una suspensión por lluvia ocurrida en mayo pasado. Dos parques de pelota condenaos a la demolición apenas se cante el último en el calendarios de ambas novenas de Nueva York. No quedará huérfana la ciudad de su gran espectáculo, sendos estadios súper modernos serán construidos a escasos metros donde hoy se erigen imponentes las moles a demoler. 



Todos saben que Yankee Stadium es llamado “La casa de Babe Ruth”, porque fue durante la época del Bambino que creció como equipo Yankees de Nueva York y porque este parque fue construido a la medida del excepcional pelotero. Lo que pocos saben es que Shea Stadium, construido en 1964 en Flushing Meadows, Queens, cerquita al escenario del US Open, fue bautizado en homenaje a un gran político, Williams Shea, factor fundamental para que Nueva York recuperara una franquicia en la Liga Nacional luego que Gigantes y Dodgers abandonaron la ciudad para mudarse a California. Gigantes en San Francisco y Dodgers en Los Angeles. Desde el 17 de abril de 1964 más de 73 millones de personas han pagado su boleto para ver juegos de beisbol en Shea Stadium. Este parque, aquel día, fue bautizado con aguas de del Gonway Canal y del Río Harlem, dos ríos en cuyas riveras estuvieron los estadios de Gigantes de Nueva York,  Polo Grounds y Dodgers de Brooklyn, Ebbets Field. Antes de establecerse en Shea Stadium, Mets de Nueva York jugaba en el Polo Grounds, como mucho antes lo hizo Yankees de Nueva York antes de construir el primer Yankee Stadium.
AL YANKEE STADIUM se llega por metro a la estación de Yankee Stadium, la que se encuentra justo afuera del mismo, en la esquina de la calle 161 y la avenida River. Se puede llegar al estadio a través de varias líneas del sistema subterráneo. El viaje desde el centro de Manhattan toma menos de 25 minutos. El tren #4, el tren B (solo los días de semana) y el tren D hacen paradas en la calle 161/Yankee Stadium. El servicio del tren Metro North hasta Connecticut y Westchester County está disponible en la parada del subterráneo de la calle. También se llega con facilidad en autobuses... Las paradas de autobús BX 6, BX 13 y BX 55 de la calle 161/Grand Concourse se encuentran muy cerca del estadio.  


EL NUEVO tendrá capacidad para 53 mil espectadores. Diez mil más que el Metropolitano de Maturín, tres veces más grande que el Olímpico de la Ciudad universitaria. El costo de la obra ronda los $USD 900 millones, es uno de los proyectos principales que se realiza en el Bronx en más de 50 años.  
La demolición del estadio de los Yankees fue dolorosa porque George Steinbrenner destruirá La Casa que Construyó Babe Ruth. Un parque de pelota   inaugurado el 15 de abril de 1923, costó dos millones 500 mil dólares, y el terreno 675 mil. Fue remodelado en 1974,  a un costo, de $USD 37 millones. El nuevo Yankee Stadium, en vez 12 suites podrá vender como propiedad horizontal  58 en el nuevo.  Los Yankees pagan los 900 millones de dólares que cuesta la construcción del nuevo Yankee Stadium, mientras la ciudad aporta el terreno y las comodidades alrededor, como arboledas, parques, áreas de paseo y locales comerciales. Ha sido  un maravilloso escenario de los más variados espectáculos y acontecimientos. Su historia en el Boxeo es importante, porque en su diamante  se celebraron 30 peleas de boxeo por campeonatos mundiales. En su cuadrilátero estuvieron Benny Leonard, Lou Tendler, Joe Louis, Max Schmeling, Muhammad Alí y Ken Norton. Tres Papas oficiaron misas ahí, Pablo VI en 1965, Juan Pablo II en 1979, y Benedicto XVI recién en el 2008. El Juego de Estrellas se jugó en 1939, 1960 y 1977; y este año se realizará en su diamante. Treinta y siete de las 39 Series Mundiales de los Yankees fueron vistas en esos terrenos

miércoles, 16 de mayo de 2018

PRONTO EN LIBRERÍAS


INFATIGABLES
El libro de Víctor José López
que narra la saga de Leopoldo López



Rafael Ortega es el primero de una saga de héroes políti- cos y militares que desenmascaran el hilo de la historia política de Venezuela y que hasta Leopoldo López Mendoza nutren la trama a que hacemos referencia... Su ejemplo, su lucha, y las metas ideológicas de Rafael Ortega urdirán la historia política venezolana en el infatigable sendero de la contienda permanente.
El origen de todos levantamos de la hojarasca de los relatos de la familia de doña Rafaela Manuela Ortega Barreto, su nieta, pues nos contaba la abuela que su abuelo dejó sus quehaceres vaqueros en las tierras de los hatos de la familia en los llanos de Cojedes cuando el general “Rafael Urdaneta se lo llevó en la tropa que se marchaba a los llanos de la Nueva Granada”. 

viernes, 11 de mayo de 2018

EL BEISBOL DE MIS RECUERDOS (14) Víctor José López EL CLÁSICO Y LA SERIE MUNDIAL




EL CLÁSICO MUNDIAL de Beisbol ha sido maltratado en su imagen, lamentablemente maltratada por la propia gente del béisbol. El Clásico acaba de salir del cascarón, y como un recién nacido trastabilla, tiene defectos, como defectos tuvo el Mundial de Fútbol cuando rompió la cáscara en su cuna, al ver la luz en el Estadio Centenario de Montevideo en 1930, cobrando vida luego de grandes esfuerzos organizativos que habían surgido en el cuando Uruguay refrendó el tituló Campeón del Mundo en los Juegos Olímpicos de París, 1924. Antes lo había logrado en 1920.

Aquellos Olímpicos entusiasmaron a la gente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), nacida el 21 de mayo de 1904, para proponer la organización de un Campeonato Mundial. Uruguay como Campeón Olímpico en 1924, ganó la buena pro para la sede del primer torneo pautado para 1930, lo  hizo la nación oriental en dura competencia con los aspirantes europeos: Italia,Hungría, los Países Bajos,EspañaSuecia. El gobierno charrúa, entusiasmado con dos campeonatos olímpicos (1924 y 1928) logrados por la celeste, ordenó la construcción del magnífico Estadio Centenario como escenario para el I Mundial de Fútbol. 
Eran días de sueños, y cuando se sueña también surgen pesadillas como el boicot de algunas selecciones que declinaron su participación con el argumento del costo del viaje a través del charco. Sólo acudieron a la cita Francia, Bélgica, Yugoslavia y Rumania por Europa. Se rajaron los futbolistas, ¡de ninguna manera! Como si fuera poco la niñez del Mundial de Fútbol encontraría en el camino de su desarrollo peligrosas propuestas políticas como los regímenes fascista y nacional socialista en Italia y Alemania, la II Guerra Mundial y otros inconvenientes que palidecen ante la insensatez de las protestas de ahora de alguno que otro vitoqueado pelotero venezolano, o del voraz apetito por los negocios fáciles y lucrativos de ciertos personajes protagonistas de nuestra dirigencia deportiva.


Creer que por estar el Clásico Mundial en manos de la Major League Baseball iba a nacer inmaculado, es desconocer los escandalosos orígenes de la MLB. El parto de lo que en el tiempo se conocería como Beisbol Organizado fue una cesárea envuelta en fétidos pañales de corruptelas, rodeado por apostadores y jueces venales y con inquisitorial supervisión de fanáticos religiosos. Un camino que fue enderezado por el amor al deporte, en primer lugar, su sintonía con una nación que le abanderó como “deporte nacional” y a la postre con la fortaleza que le ha dado el éxito económico. Así que no hay que desesperar con el Clásico Mundial y la presencia de Venezuela en el mismo. Es cosa de paciencia, esperar que esta agua revueltas se asienten para gritar ¡Play Ball!   


Los equipos  Boston Americans y Pittsburgh Pirates en Huntington Avenue Baseball Grounds el 13 de octubre de 1903

LA SERIE MUNDIALde béisbol tiene partida de nacimiento el primero de octubre de 1903, cuando Peregrinos de Boston y Piratas de Pittsburgh disputaron el World Championship Games. Boston en la serie  de ocho partidos venció (5 – 3) a Piratas de Pittsburgh; pero, antes se habían disputado series de exhibición entre los campeones de la Liga Nacional y la American Association,  que fueron anunciados como Series Mundiales. Fue entre 1884 y 1890. El éxito de aquellos “juegos de exhibición” entusiasmaron a los propietarios de los equipos hasta llevarlos a la Serie Mundial que ahora conocemos y que tomó cuerpo con la construcción de la Liga Americana. ¿Quiénes participaban? En 1884, Providence Grays venció en tres juegos a New York Metropolitans. Fue la primera serie de postemporada en las grandes ligas, enfrentando a los dos campeones de cada una de las organizaciones existentes para la época. En 1885 la serie” amistosa” se prolongó a seis partidos, pues ambos conjuntos, Chicago White Stockins empató a tres juegos con San Louis Browns, una divisa histórica que por derivación del periodismo cubano conocimos los venezolanos como Carmelitas de San Luis. Aquellos Carmelitas, que desaparecerían para darle paso a la franquicia de Orioles de Baltimore, estuvo presente en las series de 1886, 1887 y 1888. Hubo equipos históricos, que le dieron paso a conocidas divisas como  fueron Gigantes de Nueva York, (1888 y 1889), Brooklyn Bridegrooms (1889 y 1890), Chicago Whitestockins (1885, 1886)  que hoy viven en los colores de Gigantes de San Francisco y Dodgers de Los Ángeles. Los Whitestockins no son ancestros de Medias Blancas, porque pertenecían a la Liga Nacional.  
 

BRANCH  RICKEY,  considerado el Gran Arquitecto del béisbol moderno, y su imagen se difuma en el olvido. Sucede lo que ha pasado en Venezuela con grandes hombres que construyeron el béisbol, como fueron  Jesús Corao, don Pablo Morales y el Negro Prieto quienes, entre muchas otras cosas, construyeron los cimientos de lo que conocemos hoy como el equipo Leones del Caracas. Pero regresando al reclamo de Branch Rickey es bueno que recordemos que fue él, Mr. Rickey quien inventó el sistema de “granjas” en la pelota. Especie de fábrica de los mejores peloteros de la historia. Introdujo la tecnología en el béisbol, como por ejemplo la máquina de bateo. En 1947 disparó un cañonazo con la introducción de Jackie Robinsonen las grandes ligas, abriendo un boquete por el que entró el chorro de peloteros negros y latino americanos que le han dado tanto brillo a la pelota universal. Si ese, la contratación de Robinson a  Dodgers de Brooklyn  fue recuerdo estelar, como scout Rickey  descubrió nada más y nada menos peloteros como Ty CobbWillie MaysRoberto ClementeDon Drysdale. ¿Alguna duda de su calidad como scout? Rickey nació en 1881 en Ohio, fue catcher en grandes ligas con Rojos de Cincinnati, Carmelitas de San Luis y Highlanders de Nueva York. Fue manager de los dos equipos de San Luis, Carmelitas y Cardenales  y General Manager de Carmelitas, Cardenales, Dodgers y Piratas de Pittsburgh.

jueves, 10 de mayo de 2018

EL BEISBOL DE MIS RECUERDOS (13) La rivalidad Yankees – Red Sox VÍCTOR JOSÉ LÓPEZ


Víctor José López
EL VITO


LA RIVALIDAD Yankees   Medias Rojas tiene un fundamento muy sólido que creció sólido a principios del pasado siglo XX. Son varios los protagonistas y múltiples las razones que nos llegan a este siglo XXI convertidos en pasión por el juego de béisbol. Algunos involucran directamente a Babe Ruth en este  conflicto de pasiones, lo que no es del todo cierto. Aunque, por qué negarlo, algo de razón tienen en lo referente a la confrontación entre bostonianos y neoyorquinos.
Todo comenzó en el tranquilo amanecer del siglo pasado, con un Medias Rojas de Boston convertido en orgullo de la ciudad, por su imbatibilidad, que había sido Campeón de la serie Mundial de 1903 – con el nombre de Pilgrims (Peregrinos) -.  que venció en la primera Serie Mundial de la historia a Piratas de Pittsburgh, y  que luego coronó en la inauguración del Fenway Park, en 1912. Tres años más arde, 1915, pulverizó a Filadelfia (4 x 1) dándose el lujo de dejar a Babe Ruth en el banco cuatro juegos y sacarlo a que cogiera sol un solo juego y en un turno al bate como emergente.

 NEWTON BAKER : ¡A LA GUERRA O A TRABAJAR!

 Boston dio cuenta rápida (4 -1) de Brooklyn en 1916,  y luego en medio de muy serios conflictos logró el pennat en 1918 cuando en Europa se libraba la Gran Guerra,  y en los despachos de las grandes ligas una huelga de peloteros suspendía el inicio de la Serie Mundial. Newton Baker, Secretario de Guerra de los Estados Unidos, ordenó a los ciudadanos “¡A la guerra o al trabajo!”, mientras el béisbol era considerado  "necesario en un momento difícil para la nación”.
 Los peloteros, liderados por dos jardineros, Harry Cooper, leftfield de Boston, y Leslie Mann, rightfield de Chicago,  exigían más dinero por participar en la Serie Mundial. El torneo entre los campeones de la Nacional, Cachorros de Chicago, y Medias Rojas de Boston, había sido adelantado por razones de la guerra europea que reclamaba los mejores hombres de la Unión Americana en los campos de batalla, y ellos estaban en los campos del béisbol. 



Aquella serie del 18 fue ganada por Boston 4 x 2.
Ese era el equipo al que la ciudad de Boston sentía tanto como orgullosa estaba de su tradición  histórica, sus universidades como Harvard y el Tecnológico de Massachusetts y el ser la cuna del conflicto independentista, la Revolución de los Estados Unidos.
Pues bien, en 1917 se atraviesa en la historia de Medias Rojas de Boston un señor de nombre Harry Frazee, empresario de teatro y productor de obras musicales en Broadway.
Harry Frazee compró en 1917 a Medias Rojas por 400 mil dólares, un equipo lleno de salud profesional con los mejores peloteros de las grandes ligas. Esa reunión de estelares jugadores fue para Frazee una especie de cuenta bancaria, pues los vendía para costear sus obras de teatro en Broadway. Yankees de Nueva York  fue el equipo que más se benefició en los traspasos y negocios de Frazee, lo que no fue bien visto por los aficionados de Boston y denunciado muchas veces por la prensa de Massachusetts.
La situación no mejoró con dos cambios que fueron fundamentales: el pitcher Carl Mays, uno de los grandes lanzadores entre 1916 y 1926, a quien se le recuerda  por que uno de sus lanzamientos mató el 16 de agosto de 1920 a Ray Chapman, al golpearlo en la cabeza provocándole fractura de cráneo. Chapman fue la segunda víctima fatal en las grandes ligas. Carl Mays, además del gran talento en el montículo era muy indisciplinado, rebelde, y en medio de una rabieta, un día de 1919, abandonó la ciudad de Boston y a Medias Rojas, lo que aprovechó Harry Frazee para negociarlo con Yankees de Nueva York. Esta acción comercial encolerizó a Ban Johnson, presidente de la Liga Americana, quien vetó la transacción señalando que Mays en vez de ser negociado debería de ser suspendido. El pleito llegó a la corte, y Yankees fue favorecido. Más leña para el fuego.
El otro personaje al que nos referimos fue George Herman Ruth, un muy joven pitcher zurdo quien, curiosamente, tenía un devastador poder al bate. Ruth había sido adquirido por Boston de la organización Orioles de Baltimore, un equipo de ligas menores, donde había ido a parar aquel huérfano del Saint Mary´s School, y fue vendido a Nueva York el 26 de diciembre de 1919 por 125 mil dólares y un préstamo de 300 mil dólares a Frazee para cubrir los gastos de la puesta en escena de la obra “No, No, Nannett”, donde trabajaba una bella artista que llevaba por la calle de la amargura al señor Frazee. La obra de teatro dio espléndidas ganancias, pero los fanáticos de Boston se enojaron con el dueño de Medias Rojas y cuenta la leyenda que Babe Ruth, cuando abandonaba la ciudad, maldijo al Fenway Park.
Estos elementos, agregados a la olla donde ya existían condimentos que enturbiaban el caldo, como las diferencias religiosas, políticas y circunstanciales, le dieron al caldo de la confrontación deportiva un sabor de apasionada competencia sólo comparable con la que viven los grandes clubes del fútbol en Europa o Sur América. Nos referimos al United y al City en Manchester, Inglaterra, el Inter y el AC Milan en Italia, el Real Madrid y el Barcelona en España, Boca y River en Buenos Aires, o Flamingo y Fluminense en Rio de Janeiro … En fin, un Caracas Magallanes, pero en las grandes ligas.

miércoles, 9 de mayo de 2018

LA COMBINACIÓN SHORT -SEGUNDA DE VENEZOLANOS EN LAS GRANDES LIGAS por Miguel Dupouy Gómez.

Combinación de campo-cortos y segunda bases venezolanos en las Grandes Ligas



publicado en el Blog https://beisbolinmortal.blogspot.com

Ronald Torreyes y Gleyber Torres combinación venezolana con los Yanquis de Nueva York en 2018.

En el día de ayer, pude disfrutar el encuentro entre los Indios de Cleveland y los Yanquis de Nueva York, en el Yankee Stadium, donde actuaron como titulares, del equipo de casa, los jóvenes grande-ligas venezolanos que hicieron combinación en el campo-corto y la segunda base en un mismo equipo de las Grandes Ligas. Me refiero al campo-corto Ronald Torreyes y al segunda base Gleyber Torres, quienes han conformado una gran combinación sobre la segunda almohadilla, en el equipo más famoso, poseedor de grandes estrellas del béisbol y de una historia importante, al haber conquistado más campeonatos en las Grandes Ligas, como son los Yanquis de Nueva York.

Esperamos que se consoliden y tengan grandes actuaciones juntos, para poder disfrutarlas con el transcurrir de los años. Ciertamente, el titular del campo-corto de los Mulos de Manhattan es el buen pelotero Didí Gregorius, que ha demostrado su calidad, excelente bateo y buen guante, pero nadie sabe qué pueda ocurrir en el futuro.

Esta temporada, también se ha consolidado la pareja del campo-corto Freddy Galvis y el caramero Carlos Asuaje, con los Padres de San Diego.

A partir de 2016, otra pareja venezolana ha hecho un buen trabajo a la defensiva sobre la intermedia, el campo-corto Wilmer Flores y el camarero Asdrúbal Cabrera, de los Mets de Nueva York han estado cumpliendo un gran trabajo.

Esa misma campaña, con los Rojos de Cincinnati, se establecieron el campo-corto Eugenio Suárez y el intermedista José Peraza, realizando una gran labor.

Omar Infante y Alcides Escobar, de los Reales de Kansas City, se titularon campeones de la Serie Mundial de 2015 como titulares de la segunda base y el campo-corto.

Otra de las grandes combinaciones de venezolanos fue la de Alcides Escobar y Omar Infante, con los Reales de Kansas City, desde la campaña 2014 a la 2016, donde se titularon campeones en la Serie Mundial de 2015.

Los titulares de la Liga Americana en el Juego de las Estrellas de 2015. Aparecen los peloteros venezolanos: el campo-corto Alcides Escobar, el segunda base, José Altuve y el catcher Salvador Pérez.

En el Juego de las Estrellas, celebrado el 14 de julio de 2015, en el Great American Ball Park de Cincinnati, actuaron como titulares de la Liga Americana, el short-stop Alcides Escobar y el segunda base José Altuve. Escobar actuó hasta la parte alta del sexto inning, cuando fue sustituido por José Iglesias. Escobar le había bateado 1 sencillo al jardín izquierdo en la parte alta del quinto episodio, ante la estrella del pitcheo Clayton Kershaw. Altuve jugó hasta la parte baja del quinto inning, siendo cambiado por Jason Kipnis. Era la primera vez que una pareja de campo-corto y segunda base criollos eran titulares en la Liga Americana, quienes ganaron finalmente 6-3 a la Liga Nacional. 

Elvis Andrus y Rougned Odor, con los Rangers de Texas.

Las temporadas de 2014 a 2018, el campo-corto Elvis Andrus y el segunda base Rougned Odor han conformado una buena pareja defensiva en la parte central del diamante, con los Rangers de Texas.

Desde la campaña de 2013 a 2017, el campo-corto Freddy Galvis y el segunda base, César Hernández hicieron una gran combinación con los Filis de Filadelfia.

Ya a partir de los últimos años, muchos han sido los encuentros en que se han enfrentado 2 parejas de campo-cortos y segunda base criollas en un partido de Grandes Ligas.

Los años 2012 a 2014, el short-stop Marwin González y el segunda base José Altuve hicieron pareja alrededor de la segunda almohadilla con los Astros de Houston.

En 2010, los campo-cortos Alex González y Omar Infante hicieron pareja junto al segunda base Martín Prado, con los Bravos de Atlanta.

En 2008, el campo-corto Omar Vizquel y el segunda base José Castillo, de los Gigantes de San Francisco estuvieron algunos juegos juntos, compartiendo posición con el utility Iván Ochoa.

Los años 2004 y 2007, el short-stop Carlos Guillén y el segunda base Omar Infante, como titulares de sus respectivas posiciones hicieron una solvente y buena pareja defensiva, con los Tigres de Detroit.

En los años 2002 y 2003, el campo-corto Carlos Guillén y el camarero Luis Ugueto, de los Marineros de Seattle, compartieron el infield central en algunos juegos.

En 2000, el campo-corto Oswaldo "Ozzie" Guillén y el segunda base Miguel Cairo, con los Mantarrayas de Tampa Bay hicieron combinación en algunos encuentros.

En 1997, los campo-cortos Alex González y Tomás Pérez establecieron combinación a la defensiva alrededor del segundo saco con el camarero Carlos García, de los Azulejos de Toronto.

En 1996, el campo-corto Álvaro Espinoza y el segunda base Edgardo Alfonzo jugaron únicamente 7 partidos juntos cubriendo el terreno de la intermedia, con los Mets de Nueva York.

Esa misma campaña, el campo-corto Alex González y el intermedista Tomás Pérez y su suplente, Miguel Cairo, con los Azulejos de Toronto, defendieron y establecieron una segura combinación alrededor de la segunda almohadilla. 

En 1995, el campo-corto Omar Vizquel y el segunda base Álvaro Espinoza, jugaron algunos partidos juntos, ante la ausencia del camarero boricua Roberto Alomar, con los Indios de Cleveland.

Oswaldo "Ozzie" Guillén y Fred Manrique, de los Medias Blancas de Chicago.

Desde 1987 a 1989, el campo-corto Oswaldo "Ozzie" Guillén y el camarero Fred Manrique, conformaron una buena combinación en el centro del cuadro interior, con los Medias Blancas de Chicago.

En 1983, el campo-corto Argenis Salazar y el segunda base Jesús Marcano "Manny" Trillo, con los Expos de Montreal hicieron pareja en algunos partidos de su conjunto.

Dos ídolos venezolanos: David Concepción y Jesús Marcano "Manny" Trillo, primera pareja criolla en jugar juntos como campo-corto y segunda base, respectivamente, en un Clásico de Mitad de Temporada.

En los Juegos de las Estrellas de 1977, 1981 y 1982, el campo-corto David Concepción y el camarero Jesús Marcano Trillo, jugaron juntos como máximos exponentes de sus respectivas posiciones. 

El 13 de julio de 1982, en el Olympic Stadium de Montreal, por primera vez una combinación de campo corto y segunda base de venezolanos eran titulares en un Juego de las Estrellas. El short-stop David Concepción, de los Rojos de Cincinnati y el intermedista Jesús Marcano "Manny" Trillo, de los Filis de Filadelfia, jugaron desde el inicio 5 innings al campo juntos. Trillo sustituido en la parte baja del quinto inning por Steve Sax y David Concepción en la parte baja del séptimo inning, por Ozzie Smith. En ese partido, David Concepción ganó el premio de "Jugador Más Valioso", al irse de 3-1, 1 jonrón de 2 carreras ante el pitcher Dennis Eckersley y 1 anotada, para darle el triunfo a su equipo finalmente 4-1. Trillo se fue de 2-1, 1 sencillo al jardín central, ante el pitcher Floyd Bannister.

El 9 de agosto de 1981, en el Municipal Stadium de Cleveland, David Concepción como campo-corto titular de la Liga Nacional, pudo hacer combinación alrededor de la segunda almohadilla con Jesús Marcano Trillo, representando a los Filis de Filadelfia, cuando entró al partido como segunda base en sustitución del titular Davey Lopes, en la parte baja del tercer inning. Era la primera vez que 2 venezolanos hacían combinación alrededor de la intermedia en un Juego de las Estrellas y en un partido de Grandes Ligas. La Liga Nacional ganó 5-4.

El 19 de julio de 1977, en el Yankee Stadium de Nueva York, por primera vez 1 campo-corto y 1 segunda base eran elegidos para un Juego de las Estrellas, representando la Liga Nacional. Concepción, de los Rojos de Cincinnati, como titular del campo-corto y Jesús Marcano "Manny" Trillo, de los Cachorros de Chicago, como camarero. Concepción fue sustituido en la parte baja del sexto inning y Trillo entró en el cierre del séptimo episodio, sustituyendo a Joe Morgan. Sin embargo, no pudieron jugar juntos al campo en el partido. La Liga Nacional ganó 7-5 ala Liga Americana.

He querido recordar, algunas de las combinaciones criollas en las Grandes Ligas, que nos deparan y llenaron de satisfacciones, enorgulleciendo nuestro béisbol en la Gran Carpa.

Miguel Dupouy Gómez.

domingo, 6 de mayo de 2018

EL BEISBOL DE MIS RECUERDOS (12) Víctor José López LOS NÚMEROS LE DAN VIDA AL BEISBOL






De no ser por los números la pelota sería para nosotros un deporte como lo es el Cricket, antecesor directo del Beisbol, un juego que no ha tenido el  gancho del beisbol para atraparnos como atrapados estamos, convertidos en fanáticos del pasatiempo que más identifica a los Estados Unidos como nación.


Alexander Cartwright
De no haber sido por los aportes de Henry Chadwick y de Alexander Cartwright, hoy no estaríamos gozando de los placeres que nos regala el beisbol como pasatiempo y pasión. No tendría la intensidad que viven la tertulia y la polémica, y por encima de todas las cosas el placer que da el conocer datos que le dan al aficionado ínfulas de conocedor de situaciones sobre las cuales puede especular y participar cuando se viste al beisbol de religión o de ciencia, y une  fanáticos y expertos.

 El señor Alexander Cartwright desarrolló los primeros reglamentos del juego, separándose definitivamente del Cricket, del rounder y de otras manifestaciones de la pelota. Henry Chadwick aportó un sistema de anotaciones que ha permitido llevar el ritmo de la acción en cada uno de los desafíos, jugada por jugada, al desarrollar los primeros Box Scores con dimensión y anotaciones apropiadas para difundir a través de los diarios lo ocurrido en el terreno de juego. 
El primer  Box Score se publicó en 1859, en un juego entre Brooklyn Excelsiors y los Stars. Ese mismo año de 1859, se publicó el primer Libro de Reglas. Dos documentos que marcan la Partida de Nacimiento del Beisbol. Chadwick, por sus notables aportes como Notario y Juez, fue elegido vicepresidente de la Baseball Reporters Association, antecendente de la Asociación de Cronistas del Beisbol que cada año elige los ganadores de los premios Cy Young, Más Valioso (MVP), Managers del Año, y Novatos en ambas ligas. 

Spalding inventó el que Abner Doubleday,
 era el padre del
  juego

Chadwick se vio involucrado constantemente en los Comités de Reglas y las constantes modificaciones de estas y de sus reglamentos. A medida que crecía en importancia el Beisbol, crecía una fábula inventada por Albert Spalding, en su intención de convertir el Beisbol en algo más que un juego, identificarlo como pasatiempo nacional de los norteamericanos, con  patente nacionalista de aquella nación que emergía unida luego de una terrible Guerra de Secesión.  Spalding inventó la especie que Abner Doubleday, un oficial del Ejército de los Estados Unidos, era el padre del  juego. La mentira de Spalding peleó codo a codo con la verdad de Cartwright en las cortes de los Estados Unidos, hasta llegar a la sentencia lograda por la Comisión Mills en 1905, que el beisbol, mucho antes que se le atribuyera a Doubleday, que no inventó nada, ya se jugaba en los Elysian Fields de Nueva Jersey, donde por cierto hay una placa cerca del sitio donde nació Frank Sinatra. En  Nueva York, por esa época, el beisbol era practicado por un grupo conocido como los socios del club  Knickerbokers. En 1995 una Corte de San Francisco sentenció que Dobleday no había inventado el juego, ni nada. Y antes Teodoro Roosevelt había declarado que Chadwick era el padre del juego de pelota.
De no haber sido por el registro del notario Henry Chadwick, y las reglas de Alexander Cartwright, hoy no viviríamos la polémica que dirimen, en tono de gran jerarquía nuestros estupendos cronistas del beisbol que se han entusiasmado con la elección del valenciano Félix Hernández como “Cy Young” de la Liga Americana” 
CY YOUNG 
El 6 de agosto de 1890 un equipo  Spiders de Cleveland  pagó 300 dólares por un pitcher novato. Además del dinero, le dio un traje, calzado y sombrero, porque aquel muchacho campesino, procedente de los maizales de Ohio, sólo tenía franela y pantalón y andaba descalzo. Cuando el joven grandulón y mofletudo se uniformó y salió al terreno de juego,  causó hilaridad. Lo confundieron, por su figura corpulenta y de irregulares proporciones, con “Cyrus”, un muñeco que ilustraba las etiquetas de los productos de maíz en la zona. Aquel muchachote era Denton True Young, a quien desde ese día sus compañeros de equipo distinguirían con el apócope de “Cy”, por su similitud a “Cyrus”. Versión esta de los autores Geoffrey C. Ward y Ken Burns, “no porque le llamaran “Ciclón”. “El Ciclón” lo llamaron más tarde, cuando azotaba con sus triunfos, basándose en el “Cyrus” del muñeco de los maizales.
El relato del Sporting Life, medio que cubrió el partido, fue que Young, causó hilaridad por su figura … pero al concluir el juego recibió una prolongada ovación, ya que el novato apenas había permitido tres imparables y dominó a su antojo a los bateadores contrarios. En la entrevista que le hizo la revista Sporting LIfe, señalaba Cy Young que “todos los Young hemos sido buenos lanzadores. De niño yo era muy certero matando ardillas, y mi abuelo un día logró matar un pavo en pleno vuelo de una pedrada”
Aquel equipo de Chicago,  al que Cy Young venció en su primera actuación en el beisbol profesional, fue el famoso equipo de Cap Anson, miembro del Salón de la Fama. Anson, al concluir el juego e impresionado con la actuación del muchacho le propuso al manager de Cleveland comprarle a “Cy” por mil dólares. El dirigente de los Spiders rechazó la oferta. Spiders  se desmantelaría cuando su propietario adquirió la franquicia de grandes ligas de San Luis al comprar el equipo Perfectos. Perfectos se convertiría en los Browns, los famosos “carmelitas” y pasaría a la historia como uno de los peores equipos de la historia.
 Cy Young  transformó el apócope de Cy por “Cyclone” con sus triunfos e imbatibilidad y llegó a ganar 511 juegos en grandes ligas. Una marca considerada imposible de igualar, mucho menos superar. Su fortaleza, de cuerpo y de lanzamientos, se benefició cuando aquella temporada de rookie el montículo del pitcher en el diamante de beisbol fue distanciado a los 60 pies de la caja de bateo, distancia en la que se encuentra en estos momentos. Este imbatible campesino que con su fortaleza y velocidad cambió las burlas por ovaciones, es el único ser humano que le da su nombre a uno de los premios más importantes en el beisbol de las Grandes Ligas. 
Nuestros cronistas del beisbol, como los del resto del mundo de la pelota, se ensartaron en una grata polémica a medida se acercaba la fecha para la designación del Premio “Cy Young” de la Liga Americana.
 En la Nacional se esperaba que le dieran el “Cy Young” de Roy Halladay. Era un tiro al piso; pero para el premio de la Americana figuraba como fuerte candidato un venezolano  perteneciente a un equipo de una pobre performance, Marineros de Seattle. El récord de Félix no impresiona, en números, 13 victorias y 12 derrotas, cifras que chocan con las exigencias para el premio de la ortodoxia del beisbol. Es decir, Félix Hernández llegó a la candidatura del premio más por su condición de dominador de los bateadores oponentes, que por ganador de juegos. Sus números han sido opacados por la contundencia del dominio, que ha sido el argumento de la heterodoxia en el razonamiento que ha hecho la Asociación de Cronistas del Beisbol, 
Hernández fue sencillamente el lanzador más dominante en La Liga Americana,  en una temporada que debe marcar un punto de inflexión en la historia del beisbol para las consideraciones en lo que respecta a la excelencia del pitcheo. El de Valencia fue líder en salidas de calidad (30), entradas (249.2) y efectividad (2.27) y fue segundo en whip (1.06) y ponches (232) y tercero en juegos completos (6). 
Mucho más importantes que su relación ganados y perdidos (13 – 12) fueron las 12 aperturas de dos o menos carreras que no pudo ganar debido al pobre apoyo ofensivo de Seattle.

viernes, 4 de mayo de 2018

EL BEISBOL DE MIS RECUERDOS (11) Víctor José López JACKIE ROBINSON DESTRUYÓ EL MURO DE LA IGNOMINIA

  




Víctor José López

A JACKIE ROBINSONse le recuerda por haber sido el protagonista estelar para echar a tierra el muro del racismo en las Grandes Ligas. Robinson contribuyó con calidad como pelotero y heroísmo como hombre a que peloteros negros y muchos latinoamericanos vistieran uniformes de los mejores equipos del mundo.

 Hoy varias novenas vestirán a sus jugadores con franelas distinguidas con el número 42, y hombres como Barry Bonds honrarán a Robinson vistiendo el número que será retirado de todos los equipos de Grandes Ligas en homenaje al hijo de un esclavo, nacido en 1919 en Cairo, Georgia. 



Aquel año de 1947 fue la temporada  del debut de Jackie Robinson en Grandes Ligas. Ocurrieron otros hechos relevantes, opacados por el importante y trascendente significado  de la presencia de un pelotero negro de gran calidad. 

Branch Rickey, Gerente General de Dodgers de Brooklyn lo organizó todo como lo pudo haber organizado un relojero: Escogió a Jackie Robinson como la pieza más resistente a los ataques descomunales de una sociedad racista, hipócritamente religiosa, dominada por judíos convertidos en mártires, luego de la victoria en Europa sobre el Nacional Socialismo Alemán. 



Aquella temporada de 1947 fue la primera que televisó una Serie Mundial, un torneo entre Dodgers de Brooklyn que llegaron al pennat conducidos por Robinson
Robinson fue distinguido como el Novato del Año con promedio al bate de .297. Fue líder en bases robadas con 29. Dodgers enfrentó a Yankees que ganó en siete juegos el pennat. Aquellos yankees conquistaron la corona de la Americana con 12 juegos de ventaja. Joe DiMaggio fue el jugador Más Valioso de la L.A, superó a Ted Williams en el escrutinio de los periodistas por un voto (202 – 201). 
Williams, de Medias Rojas de Boston, ganó la Triple Corona de bateo con .343 de promedio, 32 jonrones y 114 Carreras Impulsadas. En la Liga Nacional terminaron empatados con 51 jonrones Ralph Kiner de Piratas de Pittsburgh y Johnny Mize, de Gigantes de Nueva York, quedando a cinco estacazos del récord de 56 jonrones en el viejo circuito, que era propiedad de Hack Wilson. En la lomita Ewell “El látigo” Blackwell, de Cincinnati, ganó 22  y perdió 8. Hank Geemberg, el “Rey del Jonrón”, fue vendido por la estratosférica suma de 75 mil dólares por Tigres de Detroit a Piratas de Pittsburg. La gerencia del equipo de la Ciudad del Acero acuerda reducir las dimensiones de la valla del outfield, para favorecer al jonronero recién adquirido; pero quien disfruta de las cortas distancias entre el plato y los jardines es Ralph Kiner que, como apuntamos arriba, le da sabor a la temporada con su competencia con el viejo Johnny Mize, inicialista de Gigantes de Nueva York, que en sus mejores días vistió la camiseta de Yankees de Nueva York y en Venezuela de Águilas del Concordia, acompañando a luminarias como Martín Dihigo, Joshua Gibson y César Nieves en el equipo del coronel Gonzalo Gómez de La Victoria.