Powered By Blogger

jueves, 22 de septiembre de 2016

José Altuve colecciona 200 imparables por tercera temporada seguida



 Jake Kaplan.
Houston Chronicle.
 Míércoles, 21 de septiembre de 2016.

 Oakland, Calif.- En los 55 años que esta franquicia de beisbol de Grandes Ligas ha pertenecido Houston, solo cuatro veces un pelotero ha bateado 200 imparables.
 José Altuve, de 26 años de edad, es el autor de tres de esos registros.
 Altuve conectó un roletazo de botes altos que pasó sobre la cabeza del tercera base de los Atléticos, Ryon Healy para anotarse un sencillo este martes 20 de septiembre por la noche para fraguar su estado como el primer pelotero de Grandes Ligas con tres temporadas seguidas de 200 imparables o más desde que Ichiro acumuló diez temporadas seguidas desde 2001 hasta 2010.
 “Me parece que eso es bueno”, dijo Altuve de su logro. “Estoy feliz”.
 Consecutivas o no, el segunda base estrella de los Astros es solo el quinto camarero en registrar tres temporadas de 200 imparables en su carrera, y el primero después de la segunda guerra mundial.
 El imparable de la marca de Altuve llegó en una noche cuando bateó de 5-1. Con solo 29 imparables en sus últimos 100 turnos al bate, su tórrido paso se ha enfriado considerablemente en las semanas recientes. El candidato al premio al jugador más valioso de la Liga Americana admitió sentirse aliviado al conseguir el imparable 200.
 “Absolutamente”, dijo él con una sonrisa. “Me tomó mucho tiempo. Traté de conseguir imparables en Seattle. No pude. Aquí no pude. Pero finalmente”.
“Pienso que ahora voy a conseguir más imparables”.
 Solo tres segundas bases en la historia tienen más de tres temporadas con 200 imparables. Cada uno tiene su nicho en Cooperstown. Roger Hornsby compiló siete de esas temporadas desde 1920 hasta 1929. Charlie Gehringer lo igualó entre 1929 y 1937. Nap Lajoie tuvo cuatro campañas de 200 imparables desde 1901 hasta 1910.
Sin tomar en cuenta la posición, Altuve es el pelotero 54 con al menos tres temporadas de 200 imparables. Solo 35 peloteros tienen más de tres. Ichiro y Pete Rose tienen diez cada uno, el tope en la historia de las ligas mayores.
 Antes que Altuve apareciera con 225 imparables en 2014, la campaña de Craig Biggio con 210 imparables en 1998 marcaba la única temporada de 200 imparables en la historia de la franquicia de los Astros.

Traducción: Alfonso L. Tusa C.


lunes, 19 de septiembre de 2016

Comentarios políticos de cinco jugadores que causaron polémica


Cinco comentarios políticamente incorrectos de cinco jugadores un tanto polémicos. 
 
1159
 
0
Compartir 

5. Diego Maradona sobre George Bush

“Es un asesino sin escrúpulos”

4. ‘Pep’ Guardiola sobre Cataluña

“Cataluña es mi país”.

3. Cristiano Ronaldo a los jugadores de Israel

“Yo no cambio mi camiseta con asesinos”.

2. Gerard Piqué sobre la consulta en Cataluña

“Estoy a favor de la consulta en Cataluña”.

1. Carlos Caszely en la campaña por el ‘No’ a Pinochet

“Mi voto es NO para que todos podamos vivir en democracia libre, sana y solidaria”.

Los diez futbolistas más desvalorizados del mundo


Diez jugadores que ya no valen lo mismo. 
 
19461
 
3
Compartir 

10. Zlatan Ibrahimovic

10-jugadores-desvalorizados
Imagen: 101greatgoals.com
El sueco se desvalorizó trece millones de euros. Ahora su pase vale 15 millones de euros.

9. Roberto Soldado

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: dailystar.co.uk
El delantero español al servicio del Tottenham se desvalorizó 15 millones de euros y ahora su pase cuesta 10 millones de euros.

8. Lukas Podolski

10-jugadores-desvalorizados
Imagen: skysports.com
El alemán, que actualmente juega para el Galatasaray de Turquía, se desvalorizó 15,5 millones de euros y ahora su pase cuesta 7,5 millones de euros.

7. Edinson Cavani

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: givemesport.com
Con razón el uruguayo no se siente satisfecho en el PSG. Si es que además de tener que jugar afuera del área, el uruguayo se ha desvalorizado 18 millones de euros y ahora su pase cuesta 42 millones de euros.

6. Bastian Schweinsteiger

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: manutd.com
El volante alemán campeón del mundo con su selección en 2014, ahora no solo es suplente en el Manchester United, sino que además, se ha desvalorizado por 18 millones de euros. Ahora su pase cuesta 22 millones de euros.

5. Mario Balotelli

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: revoluciontrespuntocero.com
Las locuras y constantes actos de indisciplina del polémico delantero italiano, no solo le han costado la titularidad en sus últimos equipos, sino también la desvalorización de su pase (que ahora cuesta 11 millones de euros). En total, ‘Super Mario’ se ha desvalorizado 19 millones de euros.

4. Frank Ribery

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: thebounce.co.za
El francés se desvalorizó 20 millones de euros y ahora su pase cuesta 22 millones de euros.

3. Andrés Iniesta 

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: geofutbol.com
El presente futbolístico del internacional español sigue siendo increíble. Sin embargo, sus años ya le han comenzado a pasar factura. Tanto que se ha desvalorizado 20 millones de euros y ahora su pase cuesta 35 millones de euros.

2. Falcao García

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: cauzar17.wordpress.com
La falta de continuidad y las desafortunadas lesiones, han convertido al delantero colombiano en uno de los futbolistas más desvalorizados del mundo. Ahora su pase cuesta 35 millones de euros.

1. Robin Van Persie 

diez-jugadores-desvalorizados
Imagen: statsbomb.com
La lista de los jugadores más desvalorizados del mundo la encabeza Robin Van Persie. El holandés (ahora al servicio del Fenerbahce), se desvalorizó 25 millones de euros y ahora su pase cuesta 15 millones de euros.

jueves, 15 de septiembre de 2016

ALFONSO TUSA C. Cuarteto de peloteros borrado en el tiempo



 A lo largo de la experiencia de un aficionado al juego de beisbol siempre existen muchos peloteros cuyos logros y anécdotas quedan solapadas bajo el cartapazo de páginas, artículos, revistas y barajitas de las grandes estrellas, los grandes ídolos ajuego. Sin embargo hay aficionados obstinados y persistentes, quienes tenemos visiones repentinas de muchos de esos jugadores que en determinado momento, quizás al comienzo de nuestro seguimiento del beisbol profesional, nos llamaron la atención. De esa manera en los últimos meses he tenido varias visiones recurrentes de cuatro peloteros aparentemente secundarios en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional y en MLB, dos jardineros, un campocorto y un lanzador quienes tenían en principio todos los atributos para trascender al montón, tanto en la liga venezolana como en MLB, y quizás lo consiguieron, pero por momentos tan fugaces que pronto la amnesia desplegó sus fauces sobre las pocas temporadas que aparecieron sobre un diamante beisbolero.





 El primero de esos peloteros que burbujea reclamando atención en mis remembranzas es un jardinero con el cual LVBP y las Águilas del Zulia tienen una deuda por saldar, Steve Hovley no aparece en los trabajos que recogen las estadísticas vitalicias de todos los peloteros que han participado en la liga y tampoco en las guías de medios de las Águilas.  De nada le valió batear para .277 en la temporada de 1969, con 91 imparables en 329 turnos al bate con los Pilotos de Seattle como jardinero de reserva. Empujó 20 carreras y anotó 41 al tiempo que despachaba 14 dobles, 3 triples y 3 jonrones y estafaba 10 almohadillas. La temporada siguiente aún mejorando su promedio de bateo a .281 en 135 turnos donde conectó 38 imparables en los primeros 40 juegos para los Cerveceros de Milwaukee, fue cambiado a los Atléticos de Oakland, ¿Quizás por su cabello largo? ¿Quizás por su aislamiento del equipo, motivo por el cual lo apodaban Orbit? Hovley terminó teniendo un resto de temporada 1970 muy descolorida con los Atléticos y aunque fue líder de la Liga Americana en apariciones como bateador emergente con los Reales de Kansas City en la temporada de 1972 el resto de su carrera se fue recortó hasta 1973. Luego de retirarse del beisbol se convirtió en plomero y muy rara vez habla de beisbol. En la temporada de 1970-71 con las  Águilas del Zulia, Hovley estuvo entre los mejores  bateadores de  LVBP entre los meses de noviembre y diciembre, no pude comprobar como terminó Hovley esa ronda eliminatoria, pero no me sorprendería que hubiese terminado entre los diez mejores bateadores de la liga.



 Luego viene el turno de Richard Chiles, un jardinero quién vino a jugar con los Navegantes del Magallanes en diciembre de 1970, en una situación muy dolorosa; Chiles fue el sustituto de Herman Hill, aquel veloz jardinero izquierdo que trajeran los Navegantes y falleciera de manera trágica, ahogado en la playa de Guaicamacuto, Carabobo el 14 de diciembre. Felipe dudaba que el reemplazo llegase siquiera a un cuarto del nivel de juego de Herman Hill, un pelotero que en pocas semanas había hipnotizado a la afición con su elegante defensiva y una relampagueante manera de correr en los jardines y las bases, además de su contacto martillante a la hora de esgrimir el madero. Jesús Mario decía que hubiera sido mejor que le dieran la oportunidad a Armando Ortíz de jugar todos los días, la temporada estaba muy avanzada y Chiles tendría que ponerse a tono sobre la marcha. 20 imparables en 57 turnos al bate, para promedio de .351 en 16 juegos, con 8 carreras anotadas, 6 empujadas y 10 boletos, empezaron a cambiar la opinión de mis hermanos. Por algo Chiles había bateado .304 con 126 imparables en 414 turnos al bate en la liga AAA donde jugó en 1970. Seguían extrañando a Herman Hill, solo que resultaba inevitable dejar de reconocer el nivel de juego mostrado por Richard Chiles y su injerencia en la clasificación del Magallanes a los play offs. El momento que más recuerdo de Chiles en la liga venezolana ocurrió en el sexto juego de la final de esa temporada 1970-71. Magallanes – La Guaira. Aquel 2 de febrero, un cuadrangular de tres carreras del receptor Harold King había igualado la pizarra a cinco carreras en la apertura del octavo episodio. En medio de un duelo de pitcheo entre los relevistas Orlando Peña por La Guaira y Jorge Lauzerique por Magallanes. Luego de los dos primeros outs del décimotercer inning, Rich Chiles entró al cajón de bateó y metió un lineazo imparable al jardín central, luego el manager Patato Pascual, trajo a Armando Ortíz de emergente por Nelson Cañas, aún recuerdo los gritos del narrador describiendo el arco del batazo de Ortíz internándose en el rincón de los músicos del estadio Universitario y la carrera incandescente de Chiles desde primera base hasta el plato para decretar la ventaja que ponía a ganar al Magallanes 6-5, para empatar esa serie final a tres juegos por lado. Chiles impuso una marca para los Astros de Houston con 11 imparables como bateador emergente en la temporada de 1971. Mucho después se dice que fue entrenador de bateo en la pelota amateur del segunda base de los Medias Rojas de Boston, Dustin Pedroia. La siguiente cita ilustra la manera como se fajaba Chiles en un terreno de beisbol: “No quiero ver esa mierda, lánzame tus mejores pitcheos”, le gritó Chiles a Nolan Ryan cuanto este le lanzó una curva bostezante, de acuerdo al testimonio del compañero de equipo Craig Cacek.


 El tercer íntegrante de este cuarteto es un campocorto de grandes atributos defensivos, desde que fue anunciado por Cardenales de Lara para la temporada 1970-71, Roger Metzger creó grandes expectativas en una liga donde destacaban David Concepción y Enzo Hernández. Como  pocos peloteros importados que han jugado en LVBP, Metzger respondió a las expectativas y se convirtió en uno de los peloteros más destacados de los pájaros rojos junto a Bob Watson, Faustino Zabala, Jim Shellenback, Ken Forsch, Oscar Zamora, Iran Paz, Scipio Spinks y Tommie Reynolds entre otros, quienes accedieron al playoff semifinal y se fajaron a sangre y fuego para solo ceder en el quinto juego ante los Navegantes del Magallanes. Metzger fue líder de los campocortos de LVBP en cada uno de los departamentos defensivos: En 58 juegos realizó 101 outs, 216 asistencias, 14 errores, 52 dobleplays, 33 dobleplays iniciados, 331 lances totales, .957 de promedio defensivo. Además bateó para .286, con 67 imparables en 234 turnos al bate, 34 carreras anotadas, 19 empujadas, 6 dobles, 6 triples, 1 jonron, 18 boletos, 11 ponches y 5 bases robadas. Sin duda uno de los mejores torpederos defensivos que haya jugado en LVBP. En 1970, con el equipo AAA de los Cachorros de Chicago, Metzger actuó en 134 juegos, tomó 492 turnos al bate, 133 imparables, 59 carreras anotadas, 20 dobles, 7 triples, 1 jonrón, 32 carreras empujadas, 12 bases robadas, 48 boletos, 44 ponches, .270 de promedio de bateo. Fue cambiado a los Astros de Houston por Héctor Torres, y jugó con los siderales desde 1971 hasta 1978, cuando fue vendido a los Gigantes de San Francisco.  Lider de los campocortos de la Liga Nacional en  porcentaje de fildeo con.982 en 1973 y .986 en 1976. Lider de los campocortos de la Liga Nacional en outs con 275 en 1971. Líder de los campocortos de la Liga Nacional en dobleplays con 101 en 1972.  Ganó el guante de oro para la posición de campocorto de la Liga Nacional en 1973. Fue líder en triples de la Liga Nacional con 11 en 1971 y 14 en 1973. En una entrevista de 1983, Metzger comentó que le hubiese gustado jugar en una Serie Mundial, pero que del resto se sentía muy a gusto con su carrera en las Grandes Ligas, a pesar de haberse retirado de manera prematura al volarse las puntas de los dedos índice, medio, anular y meñique de la mano derecha, en un accidente con una sierra de carpintería. Despues del accidente de 1979, solo pudo jugar 28 juegos en la temporada de 1980 con los Gigantes de San Francisco.


 El cuarto pasajero de ese taxi transtemporal, es un pitcher quien vino por primera vez a LVBP en la temporada 1974-75, lo recuerdo muy bien porque fue el pitcher abridor del primer desafío Magallanes – Caracas que presencié desde la tribuna central del estadio Universitario, por supuesto, ese atardecer sabatino de principios de noviembre, el estadio estaba  a reventar,  la esencia de la adrenalina tenía igual concentración en el terreno como en las gradas, tal como me lo había adelantado tío Rubén cuando veníamos en su Mercedes Benz cajita de fósforo por el autopista Francisco Fajardo, y cuando entramos al estadio por el acceso de primera base. El vértigo de la dinámica del juego me hizo apreciar la entrega y la presencia del pitcher de piel sepia cuya gorra se ajustaba sobre un tumulto de cabellos enrollados. Cada vez que  los bateadores caraquistas descifraban sus envíos, me preguntaba porqué el manager no sacaba del juego a ese pitcher, casi inmediatamente cuando dominaba al siguiente bateador intentaba recordar los numeritos que había visto en el periódico el día que anunciaron su contratación. Larry Demery pitcher derecho, viene de lanzar 48 innings en 6 juegos con el equipo AAA de los Piratas de Pittsburgh, allí tuvo marca de 4-2 con efectividad de 2.81. Eso le valió subir a la gran carpa con los Piratas, donde en 19 juegos lanzó 95.1 innings y dejó marca de 6-6 con efectividad de 4.25. Podía entender lo de la efectividad porque era su primera experiencia de Grandes Ligas, lo que no me gustaba era su relación de boletos-ponches. Esa noche Demery se encargaría de empezar a demostrarme que era un pitcher a tomar en cuenta, fue capaz de fajarse con la peligrosa lineación caraquista hasta derrotarlos 5-4. Esa temporada 1974-75 Demery terminó con marca de 6-2 con 2.14 de efectividad, 67.1 innings lanzados (5 juegos completos), y sorpresa: solo 17 boletos por 31 ponches. Luego de aquel juego en el Universitario, seguí al detalle cada una de sus aperturas, hasta el primer juego de la serie final ante los Tigres de Aragua. Demery regresaría con Magallanes para la temporada 1975-76 y aunque solo tuvo marca de 2-2, su efectividad de 1.70 en 63.2 innings lanzados, indica que se las ingenió para dejar varados a todos los bateadores que embasó por boleto, esa vez concedió 25. En 1977 debió retirarse prematuramente por problemas en el brazo de lanzar, cuando lei la noticia, fue inevitable  recordar la gesta de Demery para mantener al Magallanes compitiendo en el primer juego de la final de la temporada 1974-75, salió en el séptimo inning, abajo en la pizarra 2-1. Entonces apareció el jonrón de Dave Parker en el noveno inning para ganar 3-2, y se pudo apreciar en toda su intensidad el trabajo monticular de Larry Demery.
 Quizás ahora haya un poco más de paz en mis remembranzas, aunque sospecho que solo habrá justicia cuando Hovley aparezca en el registro general de peloteros que participaron en LVBP. Cuando Magallanes explique porque no repitió a Chiles luego de aquella solvente sustitución que hizo ante la desaparición de Herman Hill. Cuando Cardenales reconozca con más detalle y profundidad la clase de temporada que tuvo Metzger  en 1970-71. Cuando Magallanes le de el espacio que se merece Demery como uno de los mejores lanzadores que ha venido a reforzar al equipo.

Alfonso L. Tusa C.  © 11-09-2016.

miércoles, 7 de septiembre de 2016

ILUSIÓN BAJO LA LLUVIA EN MÉRIDA, SE DERRITIÓ ANTE ARGENTINA

Argentina rescató un empate en Venezuela pero perdió la punta (Clarín)

Di María encara y Añor lo sigue. (Marcelo Carroll)
Argentina rescató un punto en su visita a Venezuela, el último de las Eliminatorias Sudamericanas. Lo rescató porque perdía por dos goles en Mérida y terminó empatando 2-2 en un partido que podría haber quedado en manos de cualquiera de los dos partidos. Eso sí, perdió la punta que había alcanzado tras el triunfo con Uruguay, ahora líder. Fue el primer partido de la era Bauza sin Lionel Messi. 
El Patón decidió que para​ este segundo partido en su ciclo, Erik Lamela fuera quien ingresara en lugar de Leo. Pero el conductor, en este primer desafío sin el mejor jugador, comenzó siendo Ever Banega. El mediocampista de Inter se puso la 10 y también se cargó la responsabilidad de la creación.
El propio Banega fue el primero en llevar peligro al arco rival. A los 15 minutos sacó un remate cruzado desde la puerta del área y la pelota se fue apenas desviada. Un rato después, Ever no supo aprovechar una corrida de Angel Di María, que terminó con centro atrás y pifia del ex Boca.
Argentina era hasta entonces algo superior. Pero con el correr de los minutos se fue pinchando, permitiéndole a Venezuela crecer con muy poco. Dentro de ese crecimiento, la Selección tendría un par de minutos fatales. A los 34, Añor se mandó un jugadón por el sector derecho del ataque y sacó un zurdazo espectacular que se metió en el ángulo más lejano del arco de Sergio Romero.
Apenas un par de minutos después casi llega el segundo de los locales. Luego de un centro desde la derecha de Alexander González, Pablo Zabaleta llegó para cortar en el momento justo, cuando Josef Martínez se disponía a convertir.
Así, Argentina se fue al descanso con la desventaja en el marcador y una enorme deuda desde el juego. La ausencia de Messi quedó expuesta en esos primeros 15 minutos.
Pero el comienzo del segundo tiempo no iba a ser muy diferente a buena parte de lo visto en el primero. Casi sin actitud, el equipo visitante fue por el empate. Con Angel Di María tirando centros desde la izquierda y con Lamela totalmente desaparecido.
En cuestiones de actitud, Venezuela iba a colgarse otra estrella del pecho. Tras un largo despeje, Salomón Rondón logró escaparse por la izquierda y sin resistencia pudo tirar un centro atrás. Martínez entró sin marca por el centro, aprovechó que Romero tropezó en su movimiento, y anotó el 2-0.
Con más empuje que juego llegaría el descuento del equipo del Patón. Lucas Pratto, con pocas opciones frente al arco, peleó entre dos defensores y de puntín marcó el gol de Argentina.
Tras el descuento, los de Bauza crecieron. ¿Con fútbol? No, con ganas y empuje. Pero también con una serie importante de errores del rival, que no supo resistir la victoria. A ocho minutos del final, Nicolás Otamendi empujó dentro del área un centro desde la derecha y anotó el 2-2.
Bauza ya había puesto en cancha a Lucas Alario, Nicolás Gaitán y a Angel Correa, para sumar a Di María y a Pratto. Lo quería ganar. Y casi lo hace. Pero también estuvo a punto de perderlo. Con una llamativa inseguridad, Romero y Funes Mori se equivocaron un par de veces en el fondo y Argentina vivió momentos de zozobra. 
Finalmente Argentina se llevó un empate agridulce de Venezuela. Los próximos compromisos serán en octubre ante Perú, como visitante, y con Paraguay, de local.